Animal de los fondos,
de los limos inmundos de la sal
incrustada en la rocalla
del mobiliario.
Ejemplar
de las superficies táctiles,
donde las rayas se tumban
y el tiempo viene a posarse
como el papel,
como el sinfín
de la imagen luminosa frente a la cual
los ojos no pueden cerrarse.
Concreción en la tierra de las aguas
desbocadas—Inhábil delegado
ante el mundo de lo no existente:
epítome del zapador,
yo represento
el desenlace de las búsquedas desesperadas.