Es al comienzo,
en la exposición del tema
y no en su desarrollo
(prolijo y redundante: carne
de olvido) donde la idea
feliz, la exacta imagen
dan más de lo que dan
porque son más de lo que son:
atisbo, cuando pasmo
consumadoinsinuación,
si entrega completa.
Es empezando,
en estado de semilla
y buena esperanza,
como uno alcanza la intuición
de que hay un fin,
y que se acerca.
Es en los preludios,
donde el autor aprehende
la obra completa.
Es la promesa
la raigambre
toda del amor.